domingo, 8 de agosto de 2010

Zoón Politikón

EL ACTO IMPERIAL DE LOS INFORMES

Fotografía Víctor del Ángel
por JJ Vargas
La autoridad municipal representada por el alcalde, es la figura gubernamental que de origen, debería estar mar cerca de la gente, la primera instancia encargada de dar lo más básico de los servicios, sin embargo, pareciera que el voto ciudadano, el apoyo político a quien fue candidato y nos ofreció ser la salvación de nuestras penurias, ahora se llergue intocable, inalcanzable, exclusivo y omnipotente.
A un año de haberse colocado la investidura como alcaldes, estas mujeres y hombres que administran los 125 municipios están presentado su informe de labores. Lamentablemente, el acto no es sencillo, no es hacia el ciudadano, no es franco con sus gobernados, se le ofrece a la cúpula política, a los invitados importantes, a aquellos pesados que les pueden garantizar continuidad en el servicio público. Buscan quedar bien para continuar dependiendo de la nómina del gobierno… ¿y la gente? y ¿las promesas? Y ¿el cuate buena onda que nos pidió el voto?. No existe más, se perdió en las comodidades y prebendas que da el poder, ahora es importante, tanto así como para no voltear más hacia los de abajo.
¿El informe es una rendición del cuentas? Por lo menos en el inicio de los primeros actos municipales no se vio así. Nunca escuché de voz de la presidenta de Toluca, Maria Elena Barrera, cuanto se ha gastado de su presupuesto, con cuanto empezó y cuanto le queda este año. Entonces… no hay nada de entregar números claros a los ciudadanos, en estos informes no.
De acuerdo a la experiencia vivida en el evento de informe de la capital, es claro que ellos, los notables, nuestros importantes funcionarios son cosa a parte. El escenario se prepara ex profeso para colocar a los de primer nivel y de ahí en cadena descendente de acuerdo al cargo, a la posición política o hacia el interés del informante, quien o quienes seguirán siendo los benefactores de la carrera política en el futuro de nuestra alcaldesa.
A fuera, apartados por una cerca y una centena de guardias de seguridad si está la gente, el pueblo, los gobernados. ellos que durante la campaña si eran los invitados principales, ellos que si eran importantes y a quienes deberían de convencer, de seducir con la dádiva para arrancarles el voto ese sufragio que los encumbró y los colocó al frente del poder. Ellos que ahora ven los toros no desde la barrera, sino desde la calle al exterior de la plaza.
Leo con atención el resumen de informe municipal que me regala una edecán de Toluca. Muchos números y nombres de programas que el gobierno toluqueño asegura haber aplicado durante un año y me gustaría preguntar: ¿cuál de todos estos bondadosos esfuerzos se aplicaron en mi colonia? Yo no recuerdo ninguno. Veo con molestia las bolsas de basura tirada en la banqueta, los focos del alumbrado fundidos o en un prende y apaga intermitente, la coladera tapada y la esquina inundada cada que llueve, a mi vecino que lo han asaltado 2 veces en menos de medio año. ¿Para que tenemos entonces gobierno municipal?

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